Cansados de la inmutabilidad
del Cielo, una decena de ángeles decide probar suerte en el mundo de los
humanos. Una vez ahí, su calidad de semidioses fugitivos les ganará algunas
recompensas terrenales pero también una gran cantidad de castigos a manos de
los ejércitos del Altítismo.
El ritmo narrativo de esta
nouvelle, estructurada como un conjunto crónicas donde el argumento finalmente
converge en la eterna lucha entre el Bien y el Mal, jamás decae. Detrás del
tránsito de los personajes, de su advenimiento y ocaso, se encuentra lo que el
antropólogo y mitólogo estadounidense Joseph Campbell llamó el periplo del
héroe o monomito. El mismo Campbell extrapola este concepto hacia otras esferas,
tales como el estudio de los cuentos de hadas o de la religión.
Como parte del folclore; mitos,
cuentos y leyendas han acompañado al hombre en prácticamente todas las culturas.
De igual manera, es válido que estos productos de la tradición sean vivificados
mediante su reformulación. Haciendo uso de este recurso, el autor de Cherub nos regala una epopeya en que
destacan los valores de la humildad y el autoconocimiento, pero también una
crítica frontal al dogmatismo y la intolerancia:
«—¡No es justo lo que están haciendo! ¿Por qué amargar la vida de estos adanes que viven pacíficamente? ¿Por qué dejar que un pueblo bárbaro saquee y asesine al otro solo porque cree ser el "elegido"? ¿Por qué acabar con un dios que ama y protege a esta gente?»
« —El fin justifica los medios, Dios justifica al fin, y Dios justifica a Dios…»
Aunque cada pasaje está montado
con una prosa atrayente, es particularmente en las escenas de combate donde la
escritura de J. Daniel Abrego brilla más, con un estilo que recuerda por su
celeridad al manga japonés y a los videojuegos.
Publicado de manera independiente,
Cherub es una obra que tiene todo
para conectar con el gran público y convertirse en una saga exitosa.
Links:
Redes sociales de J. Daniel Abrego V. (Viento del Sur):